FIESTA de pijamas en el PSOE balear. Este fin de semana, el socialismo se compara las tetas y se hace el test de la Super Pop para saber cuál tendrá antes su primera vez, si Francina o Aina.
Nuestra izquierda más femen ha empezado a mostrar síntomas de consciencia, un poco como Shumacher, con unas elecciones travestidas en las que Armengol debe demostrar a los suyos que tiene el partido bajo control, al menos lo justito para manipularse a sí mismo. Liberados gobernados por la secretaria general han tirado de agenda para, a falta de militancia, hinchar con simpatía la burbuja del socialismo, aprovechando la oferta de a dos euros la papeleta, cuyo destino final es mantener al PSIB en la sección de congelados.