El presidente de la gestora del PSOE Javier Fernández ha llamado por teléfono al presidente del Gobierno en funciones Mariano Rajoy para saber qué parte del sí no ha entendido. De momento ninguna, debió pensar Rajoy, más o menos como el resto de ciudadanos, a quienes el mensaje del PSOE, todos ellos, les suena igual que cuando David Beckham dijo «quiero que Brooklyn, mi hijo, sea cristianizado, pero no sé todavía a qué religión».

Aun así el presidente en funciones dijo en Torremolinos (hay cosas que hay que decir en Torremolinos) que no podrá condiciones al PSOE para negociar la investidura. Es más, tampoco pondrá condiciones al PSOE para ir a terceras elecciones.

Un socialista viene a verme en EL MUNDO